Privilegiado marco natural
La despensa asturiana, gracias al privilegiado marco natural que caracteriza al Principado, ha sido siempre una de las más variadas y suculentas del panorama español. La fertilidad y las características de las tierras de Asturias, unidas a una climatología atlántica, húmeda y templada, ha venido siendo la base de una huerta con productos de excepcionales cualidades: tomates, patatas, lechugas, “fréjoles” (judías verdes planas), “arbeyos” (guisantes), cebollas, repollos, berzas, “cimois” (grelos), pimientos, coliflores o